Reporta la Agencia de Noticias Hawzah: Huyyatul Islam wal-Muslimin Masud Ali pronunció un discurso ante los peregrinos en la explanada del Imam Jomeini (QEPD) del Santuario, después de las oraciones del anochecer y de la noche (Maghrib e Isha), con motivo de la celebración del nacimiento del Gran Profeta (PBD) y del Imam Ya'far as-Sadiq (P).

En su discurso, afirmó: "Las perfecciones divinas, como el conocimiento, la misericordia, la sabiduría y el perdón, son infinitas y no existe mezquindad o limitación alguna por parte de Dios. Sin embargo, la recepción de estas perfecciones depende de la capacidad del ser humano. Si el receptáculo interior es pequeño, el beneficio será escaso; y si el ser humano amplía su capacidad, Dios hará fluir Su misericordia infinita en su ser".

Huyyatul Islam wal-Muslimin Ali, señalando que el Profeta Muhammad (PBD) poseía la mayor capacidad entre todas las criaturas, añadió: "Si todos los seres humanos tuvieran una capacidad similar a la del Profeta, Dios les otorgaría tanto como le concedió a él. El Profeta (PBD) pudo recibir las realidades y conocimientos celestiales más profundos y presentarlos a su comunidad (Umma) en un lenguaje sencillo y comprensible".

Este profesor del seminario teológico (Hawzah), refiriéndose a las experiencias de la gente de conocimiento espiritual (Ahl-e Ma'rifat), dijo: "Los grandes maestros del camino espiritual (suluk) han relatado que, a través de la disciplina espiritual (riyadat), la familiaridad con el Corán y la súplica, Dios ha depositado en sus pechos tales ciencias y conocimientos que la pluma, el papel y las palabras son incapaces de describir. Esto demuestra que aumentar la capacidad espiritual está en manos del propio ser humano".

Huyyatul Islam wal-Muslimin Ali continuó: "El Sagrado Corán es el logro celestial más importante del Profeta y se considera la mayor manifestación de Dios en el mundo. Por lo tanto, la familiaridad con el Corán es la condición para beneficiarse de la guía y la luz que Dios otorgó al Profeta. Así, la mera recitación o el conocimiento de la traducción no son suficientes; es necesario familiarizarse con la verdad esencial del Corán".

Al final, enfatizó: "Todos los profetas fueron discípulos del Sello de los Profetas (PBD) [el Profeta Muhammad], y los conocimientos que recibieron provinieron del océano infinito de la ciencia y la capacidad del Profeta. Por consiguiente, nuestro camino para recibir las luces del conocimiento también consiste en profundizar nuestra familiaridad con el Corán y las enseñanzas de la Gente de la Casa del Profeta (Ahlul Bait) (P), y en agrandar nuestro propio receptáculo interior".